Relatos de navegantes

PROYECTO ANTÁRTIDA Buenos Aires – Ushuaia Federico Guerrero – Velero Quijote

por  Federico Guerrero – Asociado 125

Estamos en Ushuaia! En realidad  llegamos el 19 de Diciembre, luego de una extensa pero, salvo algunas cositas que nos dan contraste, tranquila navegación desde Buenos Aires. Tantas cosas han sucedido en el último mes, que se hace difícil contar todo…

El Quijote en la mar....

El Quijote ya en la mar, al través de Pinamar

Por empezar tuvimos los trabajos finales (que nunca son finales!)  del barco en el Club Barlovento, que  incluyeron sacar la chubasquera de lona y reemplazarla  por una  más grande  de aluminio que cubre todo el cockpit, con lona transparente que cierra por detrás.

Esto nos brinda un sitio muy cómodo para sacarnos la ropa mojada y no mojar adentro. También hicimos 4 Reels de amarre, dos a proa y dos a popa, cada uno con 110 mts de cabo flotante de 22 mm; todo esto hecho por el gran Jesus!.


nueva chubasquera


El amigo Axel Websler y Palau nos instalaron los aisladores en uno de los popeles para tener una segunda antena de BLU, lo que brinda un reaseguro en las comunicaciones. Otro trabajo serio fue aprovisionar  para todo el viaje: varios viajes a distintos supermercados volviendo siempre con el auto desbordando literalmente de comida solucionaron ese problema –el siguiente fue buscar un sitio para todo, pero luego de poner todo lo que estaba en proa en popa, lo de babor en estribor;  de regresar  todo lo de popa nuevamente a proa y lo de babor nuevamente a estribor, mágicamente los alimentos desaparecieron de nuestra vista.

También terminé de instalar la estufa, una vieja –muy vieja, Refleks, que en pruebas posteriores se mostró muy buena, sin los problemas habituales en estas estufas como son las explosiones y las bocanadas de humo para adentro (el secreto, pero no lo cuenten, es la chimenea…). El problema fue que la edad tenía a esta estufa muy cansada, por lo que tuve que solicitar un joven relevo, el que ya está a punto de llegar,  del  mismo modelo para facilitar la instalación.

probando



En nuestro breve paso por BA también tuvimos abordo grandes charlas con grandes navegantes sobre temas Antárticos, así fue que nos visitó el Capitán Ricardo Jolly y el Capi del Caimán, Igor.
Tuvimos una linda despedida con los barcos amigos del Club Cinave, con el Bogavante, el Insaciable, el Plein Soleil y el Aloha  entre muchos más…

Finalmente completamos los tanques de GO y agua y nos fuimos con la línea de flotación bien bajita, como caballeros  del mar, con las olas y el viento listos a luchar…

La lucha contra el viento se demoró unas horas ya que fue  puro motor hasta  casi Punta Piedras, donde empezó la lucha con las olas al entrar un SE fuerte al que le pusimos la proa. Y el round 1 fue para las olas… nos sucedió lo que no había pasado en las anteriores 4 mil millas de prueba que tuvo el barco: por un problema con una bomba de achique, sumado a una falla de diseño del pique de proa, éste se inundó dejando a nuestro cabrestante inmerso en un baño de agua. Siempre se aprenden cosas…algún día me gustaría dejar de aprender!

en navegación

Entramos en General Lavalle a solucionar los problemillas, donde el Gran Alfredo “el Gallego” nos dio una mano tremenda limpiando el cabrestante y dejándolo nuevamente vivito y girando…Qué gran Puerto General Lavalle!  Además, gracias a la gran actividad pesquera, el canal de acceso tiene suficiente agua hasta para barcos de unos 2 mts de calado. Para saber bien qué profundidad hay,  preguntar a la Prefectura L5C la altura que marca la escala que tienen en Lavalle. En la barra hay unos 40 cm más que lo que marque la escala.


Para entrar hay que seguir exactamente con Rumbo 180* el meridiano 056* 54´.62, desde 2 millas de la costa (sí, en la carta se muestra que uno pasa por arriba del banco…por ahí pasa el canal de los pesqueros).  La única precaución viniendo por el Este, es el Banco San Agustín que se ha extendido 1 milla hacia el NE.

primer escala

Primer escala en Gral Lavalle

 Algunos detalles interesantes de Gral. Lavalle

Qué gran Puerto General Lavalle!  Bien de paso, tanto en viajes al Sur si se presenta un frente frio o mucho viento de proa, como si se vuelve a BA y se topa uno con un Norte duro que no deja cruzar la Bahía…

Lavalle siempre esta ahí, brindando un lugar muy tranquilo y protegido. Incluso sin necesidad de entrar a la Ría, ya la costa y la baja profundidad brindan un buen reparo de los vientos del 2 y 3 cuadrante; y el Banco San Clemente del Tuyo brinda un buen reparo de los vientos del 1 cuadrante. Y como es raro tener vientos fuertes del 4 cuadrante, uno encuentra aquí un buen refugio.

El fondo es blando, pero de buen agarre.Y si se quiere entrar a la Ría y llegar hasta el pueblo de Gral Lavalle, gracias a la gran actividad pesquera, el canal de acceso tiene suficiente agua hasta para barcos de unos 2 mts de calado, siempre con la plea… Para saber bien qué profundidad hay en la barra,  preguntar a la Prefectura L5C (vhf canal 16 y 14) la altura que marca la escala que tienen en Lavalle. En la barra hay unos 40 cm más que lo que marque la escala. Para entrar hay que seguir exactamente con Rumbo 180* el meridiano 056* 54′.62, desde 2 millas de la costa (sí, en la carta se muestra que uno pasa por arriba del banco…por ahí pasa el canal de los pesqueros).

El pueblo de Lavalle se encuentra a unas 2.5 millas de la boca de la Ría, y el amarre es sobre el paredón de cemento, justo a popa del Guardacostas. Antes se habrá dejado por babor el muelle, en actual periodo de extensión, donde amarran los pesqueros.

A popa del Guardacostas hay buena profundidad, incluso con mareas bajas. Es importante tener buenas defensas, de las boyas redondas si es posible.

El centro del pueblo queda a unas 7 cuadras, y allí se encuentra todo lo básico que se necesite de alimentos. Para cosas mas técnicas, hay que pasar el centro, el que tiene unas 4 cuadras de largo, y sobre la mano izquierda esta la gran ferretería del amigo Calderón, quien tiene un gran surtido de  todo lo que se necesite.

El combustible queda mas lejos, ya sobre la ruta 11. Habrá que arreglar con algún remis ya que son unos 3 km aproximadamente. Si uno necesita arreglar algo mecánico, hay que preguntar por el Gallego Alfredo, quien es el mecánico que arregla todos los pesqueros de la zona. Su taller esta frente al muelle pesquero, a unos pocas cuadras de donde uno habrá amarrado.

Hay un colectivo que llega cada hora desde San Clemente, a 40 minutos de viaje, y desde allí hay varios servicios por día a BA. Desde Lavalle hay un bus por día tipo lechero, que también llega a BA; pero creo que es mas rápido ir a vela!

La única precaución si se recala a la Bahía viniendo por el Este, o viniendo de Mar del Plata, es el Banco San Agustín, que se ha extendido 1 milla hacia el NE. Es decir que hay que darle mas margen.

También hay que tener en cuenta que la corriente de marea entre los Bancos San Agustín y San Clemente es bastante fuerte, y mas aun en sicigias, por lo que si la marea esta encontrada con el viento puede haber olas grandes, pero que no rompen. La profundidad entre ambos bancos es del orden de los 5 metros. Una vez dentro de la bahía, ya estaremos en aguas  protegidas, de poca profundidad, por ende poca ola.

La zona en general esta libre de peligros aislados estilo barcos hundidos, pero sí hay varios bancos a los que hay que darle el debido respeto. Existe un cuarterón de la zona, el H159, el que hay que tener si se pretende navegar la zona.

Se puede navegar la Ría pasando el pueblo de Lavalle, por un par de millas más, metiéndose uno en medio del campo, navegando entre vacas, caballos y tal vez, con un poco de suerte, ciervos. La zona es excelente para pescar, y al atardecer es muy posible pescar lisas desde cualquier bote de bajo francobordo, ya que las lisas caen dentro del mismo cuando van pegando sus famosos saltos.

En varios lugares de la  Ría hay playas de conchilla blanca, aunque en general hay que esperar la marea alta. Con marea baja es mas bien barro y cangrejos lo que uno encuentra! Hay varios lugares profundos donde es posible embicar el barco en la costa.

Una buena es que en Lavalle el amarre es gratis! Pero no olvidar que la PNA local no cumple funciones de Migraciones, por lo que no despachan al Uruguay, y si se viene del extranjero no permitirán el desembarco 🙁

El que sabe mucho de estas aguas es Martín Pachiani, quien todos los años organiza su ya tradicional Encuentro Náutico de la Bahía .junto a la Asociación Deportiva Argentina de Navegantes – ADAN.

 

Entre General Lavalle y Puerto Deseado, solo tuvimos una emoción fuerte la noche que pasamos Mar del Plata, que fue una de esas oscuras y tormentosas, donde al parecer nos metimos debajo de una nube complicada que nos arrojó un soplido de 52 nudos…Le pusimos la popa, y enrollamos la vela de proa. Duró pocos minutos y luego seguimos sin más.

Un detalle anecdótico agradable fue el AIS (automatic Identification System). Al parecer la PNA tuvo la excelentísima idea de hacer obligatorio su uso a la flota pesquera , (aun no es obligación para todos los buques)  al menos a la de Altura y Mediana Altura según vimos, ya que todos los pesqueros que cruzamos lo tenían –y dudo que sea por motu proprio,  lo que además de brindarnos una seguridad mayúscula por saber quién anda ahí, nos  dio la posibilidad de recibir mensajes de saludo (con el AIS Clase A se puede enviar mensajes de texto a otros AISs).

en la mesa

Así fue que, por ejemplo, el pesquero “Franco” nos envió un “Buena Proa Quijote”; el  “Karina”, “Buena Navegata”; El “Sirius III” nos envió un “Buena Navegación!”; el Granelero “Darya Gayatri”, nos escribío “AIS Test, pls ACK”…(Test de AIS, por favor responder…)…Lamentablemente el AIS Clase B, como el nuestro y el que poseen todos los barquitos que andan por ahí sólo por placer, supongo que para no molestar a los que trabajan, no podemos enviar respuestas a tan agradables augurios de buena navegación, ni a los AIS TEST…sorry Darya Gayatri, next time…


Comentario al margen: en la página www.marinetraffic.com pueden seguir el movimiento de todos los barcos del mundo con AIS, incluido nosotros, que son recibidos por estaciones de AIS costeras…Si van ahora y buscan por Ushuaia, es posible que vean al Quijote en su amarra. O pueden poner en el buscador “quijote” y apareceremos nosotros con nuestra última posición conocida.

Así entre tanto mensajito y saludito (ya no hay paz ni en medio del mar), llegamos a Puerto Deseado…o casi.

ENTRADA

Recibimiento en kayaks en Pto. Deseado

Estábamos haciendo ingreso a la Ría, con la marea en su estoa de mínima, cuando se abrieron las ventanas de par en par y nos alcanzó un viento de 40 nudos constantes, con rachas de 55. Como soplaba de tierra, seguimos entrando a motor sin problemas, teniendo siempre la seguridad de aguas profundas nuestra popa en caso de que se plante la máquina. Pues la máquina no se plantó y, previo permiso de la PNA, nos dirigimos a nuestra “trampa cuasi mortal”, la que estaba materializada con el nombre de Yamana (debe ser una venganza de los ídem post aniquilación), camuflada bajo la excusa de Lancha de Prácticos.

En un momento que calmó el viento –bajó de 45 a 30 nudos,  nos acoderamos a la susodicha embarcación. Su tripulación muy amablemente nos recibió los cabos, y siguiendo costumbre marineras hicimos un buen matambre con los dos barcos: travesines, largos y springs para todos lados, de ida y de vuelta, en proa y en popa. A los pocos minutos, y en cuestión de segundos nomás, empezó a hacer su ingreso la Señora Marea, quien, me consta, a veces no se lleva muy bien con el Señor Viento y así fue en este caso.

Ella quería ir, y el venir.  Así,  Marea –con 5 nudos de corriente,  para un lado y Viento, de 45 nudos  para el otro,  nos hicieron unos escarceos de 1.5 metros que nos hacía meter la proa en el agua en cada ola.

Rápidamente hubo que comerse el matambre que justo terminamos de cocinar y zarpar de archí apuro. Eso hicimos y luego de dar unas cuentas vueltas por la Ría, muy linda por cierto, tiramos el fierro en proximidades de la Baliza Magallanes, la que señala la Roca Ídem, en un lugar donde hay unos 2 nudos de corriente y está bastante expuesto al viento, pero como según Einstein todo es relativo, estábamos super bien!

Magallanes ancló en estas aguas en 1520,  por reparaciones; también pasó por acá Drake en 1578  y también Cavendish en 1586,  quien denominó al lugar con el nombre que aún tiene, Désiré, en honor a uno de sus buques. 


El Beagle entró dos veces en este puerto, chocando ambas veces la misma roca, a la que pusieron su nombre obviamente, hasta que  fue volada para evitar papelones. En su diario el Capitán Fitzroy  cuenta que fondeó al Beagle exactamente donde ahora se encontraba el Quijote, desconozco si porque tuvo la misma mala experiencia que nosotros con la lancha de Prácticos, o porque dada su vasta experiencia ya sabía que no hay que amarrarse a otros barcos en estos lugares donde el Viento y la Corriente se llevan mal…O más probablemente porque no había naides…

Federico, Laura y Marcos

Federico, Laura y Márcos Oliva Day, Delegado de ADAN en Pto. Deseado


Aca en Puerto Deseado tuvimos el gratísimo placer de conocer a Marcos Oliva-Day y su Fundación Conociendo Nuestra Casa. Antes debo aclarar que Marcos nos vino a recibir, al lugar donde fondeamos, en su kayak, junto a dos amigos; recordar los 45 nudos y la corriente!  Pero para alguien que cruzó el Estrecho de Le Maire en kayak, esto era una vuelta al perro –aunque creo que fue una vuelta un tanto húmeda. 

 

En la flamante sede dimos una charla contando de dónde venimos y hacia dónde vamos y Laura contó sobre los proyectos de observación de Pingüinos y Ballenas en los que vamos a trabajar en Antártida.

charla

Aquí en Pto. Deseado Laura tuvo que tomar el avión con destino a Angola, de vuelta al trabajo, y en su reemplazo vino mi amigo Moreno, el italiano a quien acompañé a Isla de los Estados y Cabo de Hornos hace 5 años. Ahora el destino nos daba la chance de hacer un revival de aquel viaje, pero esta vez en el Quijote.

Los niños de la Fundación Conociendo Nuestra Casa participan de la Charla


Qué linda fue la estadía en Deseado! Tiene una hermosa Ría con una gran variedad de colonias de Cormoranes y Pingüinos, además de Toninas en sus aguas. Pero lo más interesante, es que  si uno mira desde la cubierta del barco hacia la inmensidad, verá exactamente lo mismo que vio Darwin, cuando en el Beagle fondearon en este mismo sitio hace más de 150 años…


Entre Deseado e Isla de los Estados hay unos 3 días de navegación, de los cuales más de 2 fueron a motor…muy poco viento y de popa. Teníamos 12 nudos de popa, lo que nos daba un viento relativo muy bajo, condición que al Quijote no le gusta. Tan poco viento y de popa nos hace rolar y eso produce un desgaste en las velas, por el continuo inflado y desinflado. En ese caso prefiero gastar Gasoil y no las velas. 


Dado el poco viento y el pronostico favorable, es que decidí hacer proa directa a Isla de los Estados. De lo contrario es recomendable mantenerse cerca de la costa para sacar ventaja de su socaire, dados los vientos predominantes del componente Oeste.

Entrada a Puerto Hoppner

En Isla de los Estados entramos en Puerto Hoppner interior. Un lugar precioso, donde sólo hay que tener precaución al pasar a la bahía interior en su muy angosto pasaje, de unos 7 metros de ancho, en el que con marea baja se sonda unos 2 metros.  Nos atamos detrás de la islita al fondo, donde ya nos esperaban  mis amigos franceses del Tangaroa, con quien venimos navegando juntos desde Paraty, Brasil. Ellos zarparon de Buenos Aires unos días antes que nosotros y habían hecho escala en Mar del Plata para comprar los cabos de amarre flotantes.

Espejo perfecto y la calma del agua!!!

Dos días nos quedamos en Hoppner, dejando que pase un fuerte viento del Sur pronosticado para el día siguiente. Luego ya con viento del Este, muy raro en esta zona, y la marea a favor, cruzamos el Estrecho de Le Maire. Para evitar los potencialmente terribles escarceos de este Estrecho hay que cruzarlo con la marea y el viento en la misma dirección; y eso hicimos, obviamente! (ya íbamos aprendiendo…)

ushuaia

Llegando a Ushuaia

El viento del Este nos hizo hacer la mitad del Canal de Beagle a vela, y luego murió, pero sin dar paso al Señor de estas aguas, el viento del Oeste, por lo que a motor nuevamente nos acercamos a nuestro destino final, Ushuaia, donde amarramos al Club AFASyN, donde tan buena gente y navegantes uno encuentra, y donde el Quijote hará su nido por al menos el próximo año y medio, ya que aquí nos quedaremos, más allá del viaje a la Antártida.

El Quijote en el muelle del AFASyN

El Quijote en el muelle del AFASyN, club con quien ADAN tiene convenio de amarra de cortesia

Hoy, mediados de Enero de este año 2013,  me encuentran haciendo los preparativos finales, de esos que antes conté que nunca son finales, y esperando, en orden de importancia dada las condiciones locales, a: La Estufa Refleks que viene de Dinamarca; a Laura que viene de Angola; y a Patricia y Erik quienes vienen, respectivamente, de UK y Noruega…Así es la vida del Marino, siempre esperando algo, cuando no la marea, el viento. Y cuando no éstos, la estufa o la Mujer!

Ushuaia

Ushuaia en toda su belleza!!!

La buena noticia recibida en estos días vino de la Dirección Nacional del Antártico, quienes nos aprobaron nuestro Estudio de Impacto Ambiental, por lo que ya estamos listos, o casi cuando termine los nunca listos preparativos finales, para zarpar.


Cuando estas líneas lleguen a destino, estaremos por  zarpar hacia la Antártida. La fecha  prevista es a partir del 26 de Enero,  cuando la meteo nos dé el visto bueno. Haremos una escala en Puerto Williams y de allí rumbo al Cabo de Hornos, al que dejaremos por Estribor y luego de pedir los permisos correspondientes a los Amos y Señores del Drake, osaremos cruzarlo de la forma más breve y rápida posible.

Federico y Carlos Menna abordo del Quijote

Federico y Carlos Menna, Delegado de ADAN en Ushuaia

Como siempre, durante la travesía estaremos enviando mensajes  a nuestra página de Facebook/syquijote   y a la página del barco www.syquijote.com


La próxima nota será escrita en Navegación en la Antártida, donde les contaremos el cruce del Drake y nuestras aventuras en el Continente Blanco y  será enviada desde allí mismo.

Feliz 2013 y buenos vientos, pero no muchos!

Federico Guerrero

Cabo de hornos y ventisqueros

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba
error: